miércoles, 21 de enero de 2015
domingo, 18 de enero de 2015
miércoles, 14 de enero de 2015
Runrún
LA MINORÍA SILENCIOSA
Hay personas que, desde hace mucho, están poniendo su tiempo
al servicio de una ilusión hasta hace poco impensable. Se reúnen, dialogan,
discuten por llegar a algún punto común. Para, desde allí, intentar cambiar las
cosas. Difícil tarea. Poner en marcha un proyecto nuevo, una organización nueva
y una política nueva. Y, una vez puesto el motor en marcha, empujar la
ciudadanía el vehículo hacia una sociedad más justa.
No puede haber cambio si los ciudadanos se limitan a votar
cada cuatro años. El cambio empieza en
uno mismo. No hay un salvador. No pensemos que harán la transformación los
votados. No porque no quieran sino porque no pueden. Lobbies, grandes empresas,
sector financiero, medios de comunicación… tienen poder suficiente para
contrarrestar cualquier empuje que les suponga una merma en sus intereses. La alternativa
necesita un apoyo continuo de la ciudadanía. O, dicho de otra manera, son los
ciudadanos los que producen los cambios.
Mientras la mayoría de la minoría silenciosa
estamos “en el sofá” esperando que nos definan el camino hacia las urnas; hay
personas invirtiendo su tiempo –y algo más– en intentar concretar un proyecto.
Debemos hacerles saber lo meritorio
de su dedicación y que, hasta que llegue el día, si no somos capaces de vencer
la pereza y unirnos a ellos, que por lo menos perciban en nosotros el ilusionante
runrún del cambio. No se llega a la meta con las elecciones… ese es el principio.
Carta publicada en Heraldo de Aragón y El Periódico de Aragón.
Carta publicada en Heraldo de Aragón y El Periódico de Aragón.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)